febrero 11, 2007

Marca de marcas

No lo tomen personal pero, ¿alguna vez han visto a alguien que trae toda la ropa y accesorios de la misma marca?, ¿no es ridículo?, ¿se imaginan pasar todo un día en el centro comercial comprando ropa habiendo visitado tan solo una tienda?

Nuestra sociedad y nuestra forma de vida están fundamentadas en lo que llamamos “libre albedrío”; somos libres de elegir un oficio, un tipo de música, una pareja e inclusive podemos decidir si tendremos hijos o si en un futuro viviremos de la caridad. Todo está en nuestras manos, es nuestra principal responsabilidad y, por mucho, nuestro mayor derecho.

Habiendo dicho lo anterior cabe preguntarnos que tanto limitamos, nosotros mismos, el ejercicio de nuestro derecho a elegir y que tan concientes somos de que lo estamos limitando voluntariamente.

Buen tema ¿no?

No quiero ser muy profundo en esto, solo quiero dejar establecida la gran importancia que tiene el hecho de que seamos libres para elegir y lo poco que cuidamos el ejercicio de este derecho.

¿Cuál será un buen ejemplo de esto?
¿Qué tal la forma en que elegimos nuestros electrónicos?

Sony quisiera que yo tuviera una VAIO, una Cybershot, un MP3 Walkman y un celular sonyericsson además de un “home theater” sony, un reproductor BlueRay y una pantalla Bravia (en realidad yo también quisiera la pantalla pero… ese no es el punto), por otra parte Samsung querría lo mismo pero con sus productos y Apple trata de convencerme de que solo compre Apple.

Por mi parte puedo decidir comprar una VAIO, conectarle un iPod, tomar mis fotos con una PowerShot (de Canon) y verlas en una pantalla AQUOS (de Sharp) a la que le puedo conectar un Nintendo Wii, un “home theater” de LG y un reproductor de DVDs sin marca conocida porque me quiero esperar a que se defina el nuevo formato (entre BlueRay y HD-DVD).

Si decido comprar todo de una sola marca voy a perderme de todas las innovaciones que los demás fabricantes le aportan a cada producto. Y si me compro el mas popular de cada producto; no necesariamente estoy obteniendo el mejor producto disponible para cada caso, solo los mas publicitados.

Y, ¿en donde es que entra mi libertad de elegir?

Si me decido por una sola marca porque me gusta y me interesa tener todo de la misma marca; tengo que estar conciente de que lo hago por gusto y como una manifestación de mi aprobación y apoyo a los productos y el desarrollo de es marca en particular.

Si me decido por la marca mas barata debo de tener muy claro que lo hago por el precio y porque la marca simplemente no me importa.

Y si decido hacer un análisis detallado de cada una de las opciones para cada uno de los productos, también tengo que ser conciente de que le estoy dando mi apoyo tan solo a los mejores productos sin importar la marca.

En ninguno de los tres casos voy a ser un mejor consumidor y mucho menos uno peor. Tan solo voy a ser un consumidor que decide libremente el destino de su dinero.

Si, posteriormente tengo una mala experiencia con una marca o con una línea de productos de una marca, entonces tendré mas argumentos para mis próximas decisiones; al igual que si la experiencia es sobresaliente.

En el caso de que algún producto tenga compatibilidad limitada o que de plano no interactúe con los de otras marcas; debemos de estar concientes de que nos está limitando las opciones para elegir y por lo tanto atenta contra nuestra libertad. Si elegimos comprarlo, entonces debemos de estar seguros de que sea por sus características, por lo que aporta en funcionalidad o por lo innovador de su diseño, no solo por ser Sony o Apple. Pongan el ejemplo que quieran, todos sabemos que esto pasa y que pasa cada vez mas.

¿Por qué es esto relevante?

Dirán que son solo electrónicos, que son juguetes y no son para toda la vida.

Es relevante porque se trata del ejercicio de un derecho por el han muerto millones, porque es el fundamento de lo que occidente propone como la mejor forma de vida y porque es lo que en el futuro nos deberá diferenciar de otras épocas: elección.

Cuando un consumidor es conciente de la razón por la que elije una marca o la otra; puede tomar decisiones con libertad.

No hay buenas ni malas decisiones, todas tienen consecuencias. Hay decisiones libres y… el resto.